Lo más rumoreado en estos momentos es que algunos de ellos podrían dirigirse a TNA Wrestling. Sin embargo, el único que es capaz de hacer lo que quiera en este momento es Teddy Long, pues su contrato ya había expirado.
Los otros talentos todavía tenían contrato cuando la WWE decidió despedirlos, por lo tanto tendrán que respetar la cláusula de no competencia de 90 días. Pasados esos tres meses, estos luchadores serán capaces de dirigirse y trabajar donde quieran. Lo más temprano que podremos ver resurgir a algunos de estos talentos en una gran compañía sería a mediados de septiembre.