Desde hacía varias semanas, Punk había estado amenazando con dejar la WWE en cuanto su contrato expirase después del pay-per-view. Retó a John Cena y, sin darse cuenta, hizo que todo el Universo de la WWE se pusiese de su lado después de cortar una increíble promo revelándose contra la compañía de Vince McMahon.
Llegó a Chicago el 17 de julio de 2011 como retador al WWE Championship y, frente a su gente, consiguió una de las mayores victorias de toda su carrera después de más de media hora de combate y una casi traición de McMahon.
En el Allstate Arena se convertía por primera vez en Campeón de la WWE y, de la misma forma y como había prometido, abandonaba la arena y la compañía ante la mirada incrédula del mismo chairman.
Desde entonces, Punk se ha ganado el respeto de mucha gente y ha conseguido mantener viva esa magnífica hazaña.